DETROIT (AP) — Cuando Gary Bornstein pagó 52.000 dólares por un Tesla Model 3 a mediados del año pasado, lo hizo sin hacer una prueba de manejo o incluso ver el auto del que ahora es dueño.
El consultor financiero de Long Island, Nueva York, investigó por su cuenta y pidió el vehículo por internet, un proceso al cual le apuesta el director general de Tesla, Elon Musk, para atraer a muchos compradores más en el futuro.