DETROIT (AP) — Cuando Gary Bornstein pagó 52.000 dólares por un Tesla Model 3 a mediados del año pasado, lo hizo sin hacer una prueba de manejo o incluso ver el auto del que ahora es dueño.
El consultor financiero de Long Island, Nueva York, investigó por su cuenta y pidió el vehículo por internet, un proceso al cual le apuesta el director general de Tesla, Elon Musk, para atraer a muchos compradores más en el futuro.
El jueves, Musk anunció un cambio radical en el modelo de negocio de Tesla. El fabricante de autos eléctricos de Silicon Valley planea cerrar casi todas sus agencias a nivel mundial y restringir las compras a internet, mientras intenta reducir los gastos generales para vender un Model 3 austero en 35.000 dólares y aun así ganar dinero.
Es un enorme riesgo y muy diferente a como la gente acostumbra comprar vehículos nuevos en Estados Unidos. Muchos estados exigen que los autos sean comprados en agencias físicas, así que la gente suele investigar en línea, pero van a las agencias a patear llantas, cerrar el trato y salir manejando.
No obstante, los expertos consideran que es el momento oportuno. Una generación de conocedores de tecnología que creció comprando bienes en Amazon sin verlos, llegó a la edad en que pueden comprar automóviles y es el mercado objetivo de Tesla. Sin embargo, incluso ellos se muestran escépticos de gastar tanto dinero sin sentarse tras el volante, sobre todo con una compra sólo superada por una casa.
“Es una compra prolongada. No es como si uno fuera por una barra de pan, leche y se compra un Tesla”, dijo David Koehler, profesor de marketing en la Universidad de Illinois-Chicago. “La gente se frustra sólo por comprar ropa en internet y que no les quede”.
Incluso Musk parecía un poco aprehensivo en una conferencia telefónica con la prensa el jueves. En un momento dijo que hay demanda para 500.000 Model 3 al año, pero también agregó, “No sé cuál es la demanda”.
Los inversionistas también se mostraban escépticos, en parte porque Musk pronosticó pérdidas en los primeros tres meses tras asegurar que era rentable cada trimestre. El jueves, las acciones de la compañía se vieron afectadas y cayeron casi 8%.
Bornstein, de 45 años, dice que se sintió raro al gastar más de 50.000 dólares por internet, pero leyó varias reseñas y se sentó en un Model 3 en una agencia Tesla cerca de su casa antes de la compra.
“Fue un sentimiento un poco raro, definitivamente un voto de confianza”, añadió. Pero se dijo contento con el auto y añadió que volvería a hacer la misma compra en línea, incluso sin estar cerca de una agencia. AP