
Washington (EFE). El Departamento de Justicia de EUA anunció el pasado 13 de enero, un acuerdo con Takata por el que el fabricante nipón de componentes del automóvil se declara culpable por el defecto en millones de airbags que ha causado la muerte al menos a 11 personas, y pagará unos 1,000 millones de dólares en multas y compensaciones.
La fiscal general del Distrito Oriental de Michigan, Barbara McQuade, anunció el acuerdo durante una rueda de prensa celebrada en Detroit.