Copenhague, 25 abr (EFE).- El fabricante de automóviles sueco Volvo Cars registró un beneficio neto de 2.005 millones de coronas suecas (191 millones de euros) en el primer trimestre de 2019, un 22 % menos interanual.
El resultado estuvo marcado por un aumento de la presión de los precios, especialmente en el mercado chino, y una subida de los costes relacionada con los nuevos aranceles que afronta la industria automovilística, según informó hoy.
El beneficio neto de explotación (ebit) cayó un 19 %, hasta 2.919 millones de coronas suecas (278 millones de euros), en tanto el bruto de explotación (ebitda) fue de 6.763 millones de coronas suecas (643 millones de euros), un 1 % menos interanual.
Volvo Cars, que es propiedad de la china Geely, logró unos ingresos entre enero y marzo de 62.910 millones de coronas suecas (5.983 millones de euros), lo que supone una subida del 11 % con respecto al mismo período de 2018.
El fabricante sueco vendió 161.320 vehículos en el primer trimestre, un 9 % más que un año antes.
El director ejecutivo de la compañía, Håkan Samuelsson, señaló al presentar el balance que los márgenes de beneficio seguirán bajo presión el resto del año, de ahí que Volvo Cars haya intensificado el foco en acciones para crear sinergias y reducir costes. Volvo