PARÍS (AP) — Renault decidió postergar su decisión sobre si iniciar negociaciones para fusionarse con Fiat Chrysler.
La junta directiva de la empresa automotriz se reunió el martes en su sede cerca de París y luego anunció que lo hará nuevamente el miércoles para “continuar estudiando con interés” la oferta de Fiat Chrysler Automobiles.
Los acontecimientos ocurren en medio de presiones del gobierno francés y de los sindicatos, y en medio de la incógnita de qué consecuencias tendrá para la alianza de Renault con las japonesas Nissan y Mitsubishi.
Una fusión Renault-Fiat Chrysler revolucionaría la industria automotriz mundial en momentos en que las compañías compiten para ofrecer más vehículos eléctricos y autónomos. De concretarse, se crearía la tercera empresa automotriz más grande del mundo, después de Volkswagen y Toyota, con capacidad de producción de 8,7 millones de vehículos al año.
Francia e Italia se han mostrado como los grandes ganadores del acuerdo, que le ahorraría a ambas empresas 5.000 millones de euros (5.600 millones de dólares), pero los sindicatos temen que podría llevar a pérdidas de empleos. Algunos analistas han advertido que los planes podrían acabar frustrados por lo difícil que resultaría administrar una empresa de semejante tamaño en varios países.
El gran perdedor podría ser la japonesa Nissan, cuya gran alianza con Renault y Mitsubishi se ve en problemas tras el arresto en noviembre de su director general Carlos Ghosn.
La junta directiva de Renault SA se reunió el martes por la tarde en su sede en Boulogne-Billancourt, en las afueras de París, para decidir si acepta la oferta presentada la semana pasada por Fiat Chrysler Automobiles.
En caso de ser aprobada, se abriría el camino para un memorándum de entendimiento no vinculante a fin de iniciar negociaciones exclusivas para una fusión. El proceso subsiguiente _que incluiría consultas con sindicatos, el gobierno francés, agencias antimonopolio y otros reguladores_ duraría aproximadamente un año.
Si la fusión llegara a incluir a Nissan-Mitsubishi, se crearía la empresa automotriz más grande del mundo, pero Nissan no fue consultada sobre el tema y ya había rechazado la idea de Ghosn de combinarse con Renault incluso antes de su arresto.
El gobierno francés, propietario de 15% de Renault, ha entablado consultas con Renault y con Fiat Chrysler Automobiles en días recientes. Una fuente oficial dijo a The Associated Press que hay “un ambiente positivo” y que aceptar la fusión “sería algo sensato”. AP