DETROIT/SAO PAULO (Reuters) - General Motors Co (GM) está planificando la rentabilidad a largo plazo en Sudamérica en base a una draconiana reducción de costos puesta en marcha durante la profunda recesión en Brasil, y a la producción de vehículos de bajo costo que también está desarrollando para China y que llegarían al mercado en el 2019.
“Hemos estado renovando la familia de vehículos (en América del Sur), aumentando la participación de mercado y llegando al punto de costo correcto, todo en preparación para una familia de vehículos”, dijo el presidente de GM, Dan Ammann, en una entrevista reciente con Reuters.
Esa “familia” consistirá en 2 millones de unidades fabricadas anualmente en Sudamérica y China, que reducirán los costos de producción. “Es una escala sin precedentes”, dijo Ammann.
GM está creciendo en Sudamérica, donde ya es la automotriz líder en ventas, sobre todo gracias a dos modelos de Chevrolet: el Onix y el Prisma (Foto). La firma espera mejores márgenes por mayores ventas y nuevos modelos de menor costo, incluidos los utilitarios e híbridos preferidos por los consumidores.
El plan de la automotriz, que GM no ha divulgado previamente, es parte de una estrategia global concentrada en la rentabilidad en lugar de intentar competir en cada mercado.
El fabricante de autos estadounidense se ha retirado de operaciones no rentables en Europa y en países como India. Pero todavía apuesta a Brasil, el gigante latinoamericano que empieza a resurgir tras su recesión más profunda en décadas.
GM recortó su personal en Brasil un 35 por ciento, acordó con los sindicatos contratos de varios años con salarios atados a la inflación, reformuló su cadena de producción y abandonó un estratégico edificio en Sao Paulo por oficinas en una planta de producción de casi 90 años.
“Todo el propósito era asegurar que maximizábamos cada pulgada de gasto”, dijo a Reuters Carlos Zarlenga, jefe de operaciones de GM en Brasil y Argentina, quien recordó que durante la recesión brasileña los ejecutivos controlaban cada pedido superior a 10.000 dólares.
Tras alcanzar un récord de 3,80 millones de unidades en 2012, las ventas en Brasil -octavo mercado mundial y principal destino en Sudamérica- se hundieron un 46 por ciento a 2,05 millones de vehículos vendidos en 2016.
La economía comenzó a repuntar gradualmente en 2017, lo que generó un alza del 9 por ciento en las ventas de autos. Las operaciones sudamericanas de GM anotaron una ganancia de 100 millones de dólares el año pasado, el primer resultado positivo desde 2013.
“América del Sur puede convertirse en un colaborador importante” para las ganancias generales de GM, dijo Ammann.
GM superó el año pasado a Fiat Chrysler Automobiles NV como líder en ventas en Brasil por primera vez desde el 2004, según datos del grupo local de la industria automotriz Anfavea.
Las ventas de autos en Brasil treparon un 16 por ciento interanual en el primer trimestre, según reportó Anfavea. GM espera que las ventas de la industria en el 2018 alcancen los 2,4 millones de unidades. GM